Sin duda, Ribeiro esperaba que algún miembro honesto del gimnasio se hubiera topado con sus auriculares y los hubiera entregado al departamento de objetos perdidos. Pero ese no fue el caso en esta historia, ya que alguien en el gimnasio descubrió sus auriculares AirPods Pro 2, los recogió y se los metió en el bolsillo o en las orejas. En realidad, fue más bien esto último ya que el ladrón comenzó a usar los auriculares como si fueran propios. Los usó en el trabajo, en casa e incluso en la playa.
Ribeiro finalmente tuvo suficiente. Quería recuperar sus auriculares AirPods Pro 2. Entonces, gracias al chip U1 de banda ultraancha incrustado dentro del estuche de carga MagSafe para los AirPods Pro 2 y la aplicación Find My, sabía dónde estaban sus auriculares robados en todo momento y tramó un plan. Esperó a que el ladrón estuviera en una dirección más cercana a él y cuando eso sucedió, se dirigió a esa dirección.
